martes, mayo 19, 2009

Adiós Débora


Testamento

Quiero dejar a aquellos que me aman
algunos bienes que algún día tuve.
Andan por ahí, hay que buscarlos
vaciarlos de un perfil de dudas
que a casi todos ellos entorpece.
Como no tienen orden ni fichero
hay que buscarlos siempre.

Sé que no es mucho dejar a quienes amo
sólo el profundo amor fiel y constante.
Reconocido o no, estuvo siempre
presente en esta vida ya añejada, dura
que se nutrió de ustedes en entrañable lazo.

Les dejo mi utopía posible
por un mundo mejor por la que lucho
con aciertos y errores día a día.
Les dejo los colores infinitos de las piedras del mar
de los cambiantes verdes, de las casas con alma.
Todo eso. Es la heredad que recibí y que lego.

No dejaré aquel dolor vivido, inmensurable.
Es muy pesada carga.
Como una cruz la llevaré conmigo.
Son las inescrutables sombras de mi alma.


Débora Céspedes (1922-2009)